La escuela virtual, la nueva realidad, la enseñanza transformada

El 2020 nos puso los pies arriba y el peso de la educación en nuestra espalda. Hemos aprendido a sortear todo tipo de situaciones y de problemáticas para que nuestros alumnos nunca pierdan las clases. Hemos combatido la pandemia desde nuestros escritorios y computadoras y nuestros mejores guerreros fueron esos chicos que se sentaban del otro lado esperando su clase.

Empieza a dar clases particulares

Creo que este año que ha pasado nos dejó un solo aprendizaje: la enseñanza y la educación es tan primario como la salud y que esta se vea afectada atenta contra el mayor de los males, la ignorancia. Tuvimos que aprender a luchar contra la ignorancia y proponer nuevas formas de trabajo para mantener conectados a los chicos.

La creatividad se hizo moneda corriente entre los docentes y la desesperanza de volver al aula fue el impulsor del desinterés en los chicos. No contentos con las clases online, duraron poco y solo una pequeña porción llegó a cumplir con todo el ciclo lectivo de manera óptima. Pero, óptima hasta cierto punto, porque hemos recortado material, no pudimos tomar exámenes, no pudimos hacer junto con ellos la tarea y no sabemos hasta qué punto nuestros alumnos pudieron aprender los temas que, con tanto esmero, quisimos enseñar.

Principales diferencias entre las clases presenciales vs las clases online
Las clases online han crecido notablemente a raíz de la pandemia provocada por la COVID-19, ¿pero son mejores que las clases prese...

Al volver a la presencialidad, uno siempre hubiese pensado que el interés estaba en recuperar eso que no se aprendió, pero después de conversar con todos los alumnos, creo que nuestro interés es y será enfocarnos en su bienestar y en su necesidad por sociabilizar y explorar este ambiente que, parecía muy conocido, pero luego de un año de no tenerlo, se comenzó a desconocer, y ese espacio es la escuela. Nuestra vieja enemiga, que hemos abrazado como a una nueva gran amiga.