La Frecuencia
La frecuencia determina la entonación de una nota musical y consiste en la cantidad de vibraciones o ciclos por segundo que se miden en Hertzios (Hz) o vps (vibraciones por segundo) o cps (ciclos por segundo).
Un tubo de órgano abierto de 1' (1 pié) produce una frecuencia de 512 Hz.
Así resulta muy fácil calcular la frecuencia que produce cualquier tubo, mediante una regla de tres:
¿Cuál es la frecuencia de un tubo de 32'?
1' 512Hz
32' XHz
X = 512/32 = 16Hz
La frecuencia es 16Hz
¿Cual será la medida del tubo que produce la frecuencia 256Hz (DO4)?
f = 512/L
L = 512/f
L = 512/256 = 2'
La longitud del tubo es 2' (2 piés)
Así podemos aplicar una fórmula práctica:
f = 512/L
donde f es la frecuencia en Hertzios y L la longitud del tubo en pies.
La Afinación natural
La afinación natural se realiza a partir de la nota LA4 con una frecuencia de 432Hz, y fué la que usaron casi todos los músicos clásicos hasta que en 1939 un militar nazi de nombre Joseph Goebbels decidió que la afinación perfecta era a partir de A=440Hz, creando un decreto que la imponía para la afinación de todas las orquestas.
En 1952 la Organización Internacional de Normalización (ISO) impuso el decreto de Goebbels como la norma universal de afinación A=440Hz y a partir de ahí todos los instrumentos y toda la producción musical emplea esa afinación.
En este estudio emplearemos la afinación natural basándonos en los tubos del órgano como generadores del sonido. La afinación A=440Hz resulta con números complicados con decimales y en cambio la afinación natural A=432Hz usa números enteros simples, facilitando la comprensión del tema.
En el órgano tubular se da la afinación natural, pues la frecuencia depende de la longitud del tubo. Así un tubo de 8' (8 piés) produce una frecuencia de 64Hz equivalente a la nota C2, según se puede observar en la Tabla de Frecuencias en afinación A=432.
Los órganos electrónicos tienen todos la afinación A = 440.