Mis clases con Anthony nunca son aburridas, siempre aparece alguna sorpresa, una pregunta, un comentario oportuno. Las espero con agrado, son momentos de pasarlo bien, podemos hablar seriamente pero siempre hay un momento para la risa. Anthony tiene la habilidad de enseñarte el francés que queremos sin que te des cuenta, sin presiones¡ A pesar de mis 72 años me siento como en mis años de secundaria en sus clases, pero no crean que todo será fácil, tendrán bastante trabajo que hacer¡ Ánimo como acostumbra decir Anthony