Para entender la filosofía hace falta no sólo los datos que encontramos en los manuales, sino que hace falta introducirse en las vivencias de los pensadores que vamos a aprender, sus anécdotas y las razones por las cuales pensaron lo que pensaron. Describir de manera esencial el tiempo en el que vivieron, para de este modo poder comprender el porqué pensaron de un cierto modo. Antiguos, medievale...
Para entender la filosofía hace falta no sólo los datos que encontramos en los manuales, sino que hace falta introducirse en las vivencias de los pensadores que vamos a aprender, sus anécdotas y las razones por las cuales pensaron lo que pensaron. Describir de manera esencial el tiempo en el que vivieron, para de este modo poder comprender el porqué pensaron de un cierto modo. Antiguos, medievales, modernos y contemporáneos, debemos tener claro cuáles son las virtudes y posibles defectos de estos tiempos, de este modo podemos entender y darle más sentido al pensamiento, y no sólo en el campo de la filosofía, sino también en las demás áreas: humanidades, artes, ciencias. Es necesario entender cómo ve el mundo un hombre de cierta época para entender lo que postula, y así conectar las ideas de los grandes pensadores de la filosofía y de las ciencias.
Por ello será idóneo hacer una vista panorámica de las ideas desde la antigüedad hasta nuestros tiempos posmodernos. Luego de ello, con la siempre limitación del tiempo, adentrarnos en las particularidades de cada pensador relevante de la historia, tratando en todo lo posible de ser imparciales, intentando presentar tanto lo bueno como lo malo en cada uno y así poder comparar las ideas. No sólo se pretende hacer una historia de la filosofía, sino también filosofar, si el tiempo lo permite.
Por último, el trabajo de la filosofía nos puede llevar a reflexionar sobre temas tan diversos que pareciera que nos perdemos o desvariamos, pero todo esto no es más que filosofar. Resido y vivo en Lima, Perú.