En cuanto a mi experiencia profesional y personal, la mejor forma de alcanzar satisfactoriamente objetivos a corto y mediano plazo por parte del estudiante es la práctica diaria de ejercicios relacionados a los temas o tópicos en cuestión de tal manera que se desarrollen habilidades para responder efectivamente cada modelo de ejercicio a tratar. La teoría puede ser descrita a lo largo de la resolución de los problemas y ejercicios y reforzada a medida que se realice la práctica oportuna. En general, es suficiente dedicarle dos horas diarias, pues de lo contrario el contenido acumulado a practicar será relativamente grande como para cubrirlo en un plazo de tiempo no favorable. Cierto es que cada persona tiene diferentes competencias y podrían estar fuera del promedio. También, por supuesto, es necesaria la asignación de tareas. Las tareas son fundamentales pues en las horas de encuentro con el estudiante no es posible abarcar todos los modelos de ejercicios al cien por ciento o por lo menos no de manera tal que se adquiera la habilidad para realizarlos. El estudiante, al realizar tareas, se enfrenta con sus debilidades y comentarlas oportunamente al profesor hará una gran diferencia.


Soy asesor académico de matemática básica y universitaria. Tengo una licenciatura en matemáticas de la Universidad Simón Bolívar (Caracas) y una maestría en matemáticas de la Universidad Federal de São Paulo (UNIFESP). Actualmente soy estudiante de doctorado de la Universidad de São Paulo (USP)