Estudié hebreo hace muchos años en mi escuela primaria y desde entonces no tuve contacto con este idioma. De la mano de Tomás, no sólo pude reconectarme con la gramática y lo complejo del hebreo, sino que a partir del estilo de las clases, los aspectos emocionales de la lengua afloran y permiten que poco a poco me apropie de la misma. Tomás es un excelente moré (maestro en hebreo), claro en sus explicaciones, motivante en la necesidad de mi estudio a solas, y establece un ritmo organizante en las clases y entre ellas. En pocos meses me encuentro pudiendo comunicarme, curioso por saber más y poder en poco viajar a Israel con el idioma en mis manos. Agradecido por sobre todas las cosas al estudio con Tomás.