Vanessa

Hace apenas dos años, cambié mi acogedora villa italiana por una vida de aventuras como nómada digital. Desde las bulliciosas calles de Canadá hasta los encantadores paisajes de Perú, he estado absorbiendo nuevas experiencias y difundiendo el amor por el italiano donde quiera que vaya.

Vivir la vida como nómada digital ha sido estimulante. Me ha permitido combinar mi pasión por viajar con mi amor por enseñar italiano. Ya sea que esté tomando un espresso en una pintoresca cafetería de Toronto o explorando ruinas antiguas en el Valle Sagrado, siempre estoy listo para conectarme con estudiantes deseosos de aprender el lenguaje del amor.

Estar en movimiento no ha frenado ni un poco mi enseñanza. Gracias a las maravillas de la tecnología, puedo llevar la belleza de la cultura y el idioma italianos a estudiantes de todo el mundo. Ya sea que estés sintonizando desde una metrópolis bulliciosa o desde un remoto pueblo de montaña, estoy a solo un clic de distancia.

Pero para mí no todo es enseñar. Vivir como nómada digital me abrió los ojos a la increíble diversidad del mundo y enriqueció mi propia comprensión de la cultura italiana. Cada nuevo lugar que visito, cada nuevo amigo que hago, añade una nueva capa a mi enseñanza y a mi propio viaje personal.

Entonces, ya sea que me acompañes desde un acogedor café en Montreal o desde una hamaca en la selva peruana, embarquémonos juntos en esta aventura lingüística. ¡El mundo es nuestro salón de clases y no hay límite a dónde Italiano puede llevarnos! ¿Pronti a partire? (¿Listo para empezar?)