Algunos se preguntarán ¿Qué es ser un estudiante en línea?, y ¿qué es eso de “en línea”? , muchos hemos escuchado, leído o conocido esta última frase: “en línea”, especialmente las personas que se desenvuelven en un entorno en donde se utilizan recursos tecnológicos como teléfonos celulares, ipad, table o computadoras en general; y que tienen acceso a lo que cada día se hace más indispensable para la obtención de información, interacción con otras personas, entre otras actividades, el Internet.
En este espacio, que para algunos se trata de un mundo virtual, hacer presencia en él como estudiante es una tarea que requiere de ciertos compromisos. Estar en línea, es estar en un espacio virtual en donde se pueden desarrollar actividades incluso de formación, lo cual está determinado por elementos de contexto y metodológicos complementados por las Tecnologías De Información y Comunicación.
Siguiendo con la visión general del estudiante en línea, antes se debe reconocer la concepción que de éste se hace referencia en muchos textos. Para autores como Bautista (2005), los estudiantes son “las o los discentes que mantienen una pauta de funcionamiento fundamentada en la autonomía y la madurez”. Cuestión que se evidencia aún más en un contexto formativo en línea, dada la condición de educación a distancia, basada en materiales, actividades y recursos de autoaprendizaje, mediación y comunicación telemática, y aprendizaje colaborativo.
He aquí entonces, algunas características que debe tener un estudiante en línea: éste debe demostrar proactividad, autonomía, metas propias, debe reflexionar sobre las propias destrezas y estrategias que aplica para aprender; participar activamente en la comunicación y en el aprendizaje colaborativo en el aula (Entorno Virtual de Enseñanza y Aprendizaje, con características que lo hacen parecer organizado como un espacio donde se realiza el proceso educativo presencial). Considerando también tomar iniciativa en muchos momentos de su aprendizaje, siempre debe procurar buscar lo que necesita, como: información, recursos, indicaciones; preguntar lo que no entiende y pedir ayuda docente y a sus compañeros, tal cual como se hace en el aula de clase presencial, pero con diferentes medios.
Por lo general, en cuanto a comunicación se refiere, la interacción se realiza, la mayoría de las veces, de forma textual, lo que implica detenerse aún más en la lectura y escritura, de tal manera que sea lo más coherente y fluida posible.
Cabe destacar que el perfil del estudiante presencial que hoy día se persigue es igual al antes mencionado y más, pero es necesario, que para que las instituciones y la acción docente en la formación en línea, supere ciertas condiciones en el ahora competitivo mundo virtual, para trabajar y aprender en un entorno en línea se debe saber en qué consiste y cómo conseguirlo. El papel del docente debe formar parte importante como mediador de su proceso, y es que éste debe explicar que para conseguir dichas competencias en un curso no basta con la dedicación exclusiva, sino que también se deben adquirir y aplicar unas destrezas y competencias transversales. El estudiante no debe creer que esta modalidad (en línea) sea “más fácil” que la presencial, pues hay que aplicar estrategias y acciones de aprendizaje acordes con el medio en que se realiza la formación. Pero tampoco debe pensar que sea “difícil”, pues lo más importante es querer hacer las cosas, y estar dispuesto a superar barreras, especialmente las que a veces aparecen en nuestra mente.
Yury Albornoz
Magíster en Educación Mención Informática y Diseño Instruccional